Miguel Utrillo

Inicia en Barcelona sus carrera de ingeniería, pero su familia se traslada a París, y termina sus estudios en el Institut National Agronomique. Su familia regresa a España, y el joven Utrillo prefiere quedarse en París, atraído por el ambiente artístico que se respiraba. Más tarde viaja a Bulgaria, Alemania y Bélgica. En 1887 vuelve a Barcelona y prepara algunos trabajos para la Exposición Universal. En 1889 el diario La Vanguardia le encarga unas crónicas de la Exposición Universal de París y se instala en Montmartre con la intención de dedicarse a la pintura. Allí conoce a Santiago Rusiñol y Ramón Casas, y se instala con ellos en el meollo de la bohemia del momento, en el Moulin de la Galette, que además de funcionar como cabaret, también se alquilaba como edificio de apartamentos. Mantiene una relación con la pintora Suzanne Valadon cuyo hijo natural, Maurice Utrillo, reconoce. En 1893 abandona París y se traslada a Estados Unidos, con intención de poner en marcha un espectáculo de sombras chinescas que fracasa. Regresa a Barcelona en 1895 y se reencuentra con Rusiñol y Casas. Con ellos formó el núcleo fundamental del movimiento modernista en Cataluña.

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Rusiñol, Canudas, Miguel Utrillo y Clarasó
en el patio de la Rue de Orient. Paris, 1890

 
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