Eugène Boudin

Nace en Normandía, hijo de un piloto de buques, con el cual trabaja ayudándole en los viajes. Desde pequeño empieza a decorar sus libros del colegio con muchos bocetos, y a los 22 años, Eugène comienza a pintar como actividad principal. Abre su propia papelería, y a través de su trabajo entra en contacto con artistas de la zona. En 1850 gana una beca que le permite mudarse a París, aunque retorna a Normandía con regularidad para pintar. Conoce a Gustave Courbet, quien le presenta a Charles Baudelaire. A los 34 años, conoce a un joven Monet de 17, y trabajan juntos durante varios meses. Los dos fueron amigos de por vida. A los 35 años presenta su primer cuadro en el Salón de París, y en 1874 participa en la primera exposición de los Impresionistas. Posteriormente, por razones de salud, se traslada a la Costa Azul y también pasa temporadas en Venecia, buscando nuevos temas. Fue uno de los primeros artistas que dedicó más tiempo a pintar al aire libre que en su taller. Su entusiasmo por la pintura del natural se evidencia en su magistral modo de plasmar las irisaciones de la arena y el agua cambiante bajo la luminosidad del sol. Ejerció gran influencia en los pintores impresionistas.


 
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